lunes, 5 de diciembre de 2016

El catálogo de Charles Messier

Obra del entusiasmo de Charles Messier es quizás, el catálogo de objetos nebulosos más famoso y utilizado por los aficionados.

Es el catálogo de objetos no estelares más utilizado por los aficionados a la astronomía. Fue compilado a lo largo de más de 20 años de observación del cuello por Charles Messier, astrónomo francés nacido en Badouville, en la región de Lorena en 1730 y fallecido en 1817 en París a la edad de 87 años.

Tras quedar huérfano a los 21 años se marchó a París donde fue contratado por el astrónomo real Joseph Nicolas Delisle. Destacó por su habilidad para el dibujo, lo que le llevó a trabajar en el observatorio de la Marina Real que se encontraba en la torre del Hotel Cluny de París.
 
La búsqueda de cometas se convirtió para Messier en su principal ocupación. Sin embargo los telescopios de la segunda mitad del siglo XVIII no eran muy precisos. Las lentes tenían defectos propios de la técnica de tallado y en muchas ocasiones producían distorsiones en la imagen, además de la poca resolución de los instrumentos de la época. Estos problemas habían que las imágenes eran borrosas y era fácil confundir, por ejemplo, un cúmulo estelar con una nebulosa. Para Messier esto se convirtió en un problema ya que en la búsqueda de cometas las manchas difusas de algunas nebulosas o cúmulos de estrellas se confundían con los tenues cometas.
Debido a esto, Messier comenzó a interesarse por esos molestos objetos difusos que aparecían en ocasiones en el ocular de su telescopio, con el fin de evitar confusiones. Así fue como Messier comenzó a recopilar en un catálogo todos esos objetos.
 
El primer catálogo se publicó en 1771 en la publicación francesa Mémoires de L'Académie Royale des Sciences. En esta primera edición Messier recopiló la posición y descripción de 45 nebulosas y cúmulos estelares. Posteriormente, en 1784 publicó un nuevo catálogo en la Connaissance des Temps con otros nuevos 58 objetos que se sumaban a los del primer catálogo. Para esta compilación contó con la ayuda de su amigo y colega Mierre Méchain, astrónomo del Real Observatorio de París. Con esta lista los objetos localizados por Messier alcanzaron la cifra de 103, de los cuales al menos 28 fueron encontrados por Méchain.
 
La cifra final de 110 se alcanzó en la década de los sesenta del siglo pasado cuando se descubrió una carta de Méchain en el almanaque del observatorio de Berlín del año 1786 donde se mencionaban estos objetos.
 
 
 
 
Es importante destacar que muchos de los objetos incluidos por Messier en su catálogo ya eran conocidos, pero la labor de este estudioso del cielo consistió en catalogarlos junto con los nuevos que el y Méchain encontraron eliminando errores en posiciones. A pesar de que los instrumentos utilizados por Messier no tenían la precisión necesaria, su catálogo destaca por sus descripciones y por la exactitud de las mediciones.
 
Para Messier, muchas de las nebulosas y cúmulos estelares catalogados no eran más que manchas difusas que con los instrumentos actuales pueden resolverse fácilmente en nebulosas, cúmulos estelares o galaxias. Así, en el catálogo figuran 39 galaxias, 29 cúmulos globulares, 27 cúmulos abiertos, 4 nebulosas planetarias, una estrella doble, una nube galáctica y un objeto inexistente (M102). Destaca la inclusión del conocido cúmulo estelar de las Pléyades. Alan Mac Robert indica que se incluyó debido a que cuando se observaban cerca del horizonte se podían confundir con un cuerpo difuso.
 
La obra de Messier constituye un valioso trabajo muy apreciado por los aficionados y forma parte del saber popular astronómico. Muchas nebulosas se conocen coloquialmente por su codificación en el catálogo como la nebulosa del cangrejo (M1) o la galaxia de Andrómeda (M31). Es apasionante imaginar a Messier en su época, en su observatorio tratando de poner orden en el firmamento, fascinado por encontrar objetos nebulosos y ubicarlos en el cielo. El entusiasmo de Messier dio como resultado un magnifico catálogo que a perdurado hasta nuestros días y sin duda ayudó al buscador de cometas a observar más de 40 cometas y descubrir por lo menos 16.
 
Después de Messier se han elaborado otros catálogos de objetos no estelares que superan los 110 objetos de Messier. A finales del siglo XIX J.L.E. Dreyer compiló el New General Calatogue (NGC)  en el que se incluyeron 7.480 objetos. Unos años después se incluyeron otros 5.386 objetos en el denominado Index Catalogue (IC).

lunes, 28 de noviembre de 2016

Alnitak

 

Alnitak es una estrella privilegiada, situada en un lugar destacado del cielo y que a lo largo de los siglos ha sido referente junto a sus dos compañeras cercanas y el resto de la constelación a la que pertenece.

 
Forma parte de la constelación de Orión y está situada a 05h 40m 45,5s de ascensión recta, -01º 56' 34" de declinación y una distancia de 700 años luz.
 

Alnitak destaca en el cielo invernal acompañada de Mintaka (δ Orionis) y Alnilam(ε Orionis), las cuales forman el conocido Cinturón de Orión o las tres Marías. Situada, por tanto en el centro de la constelación de Orión, los astrónomos le han atribuido el nombre de ζ Orionis y de las tres estrellas es la situada al sur. Su nombre proviene del árabe النطاق an-niṭāq y significa «el cinturón». Aunque no es una estrella muy destacada, merece la pena detenerse en ella para disfrutar de una de las regiones más bellas del cielo surcada por la Vía Láctea y en la que abundan las nebulosas y estrellas variables.
En realidad se trata de un sistema triple. La estrella principal es Alnitak A que es una estrella binaria, cuyo componente principal es Alnitak Aa que es una supergigante azul de tipo O, al igual que su compañera Alnitak Ab.

Alnitak Aa es una estrella muy luminosa y caliente. Su masa es de unas 20 veces la masa solar y constituye una fuente de rayos X procedentes del fuerte viento estelar. Este fuerte viento hace que la estrella pierda materia que es expulsada al espacio circundante formando a su alrededor un halo de gas y polvo.
 
Debido a su elevada temperatura y luminosidad, su vida es muy breve ya que consume una inmensa cantidad de energía. Tiene una edad de unos 6 millones de años y la fusión del hidrógeno ya ha finalizado en su núcleo y se dirige hacia su estadio de supergigante roja. Su destino es explotar como supernova y acabar como estrella de neutrones. Una vida breve que puede durar unas pocas de decenas de millones de años en contraste con las longevas vidas de otras estrellas como nuestro Sol.
 
 
 
 
La región del Cinturón de Orión es rica en estrellas en formación procedentes de las nebulosas que allí se encuentran; de hecho, las otras dos estrellas del cinturón también son estrellas jóvenes y muy luminosas como Alnitak recién nacidas en las fábricas estelares.

Alnitak B es también una estrella masiva, pero de tipo espectral B.
 

El entorno de Alnitak

Como ya se ha dicho la región que rodea la estrella es muy abundante en condensaciones de gas y es un buen lugar donde realizar estupendas observaciones astronómicas con telescopios, prismáticos y fotografía astronómica. Junto a Alnitak podemos observar la brillante nebulosa NGC 2024 surcada de franjas de polvo. Cerca de esta resplandecen las bellísimas nebulosas IC 435 y NGC 2023 sobre el fondo de una oscura nebulosa de polvo, la cual recorta la conocida nebulosa B 33, también conocida como Cabeza de Caballo, al oscurecer la nebulosa NGC 434 situada en esa misma región.
 
Este complejo sistema de nebulosas es de una belleza extraordinaria en las fotografías, aunque los tonos rosados y rojizos de la emisión es difícil de lograr con un telescopio de aficionado ya que el resplandor de Alnitak y las jóvenes estrellas azules cercanas los ocultan.